En abril de 2017, Alfredo del Mazo Maza, quien en ese entonces era candidato del PRI al gobierno del Estado de México, aseguró que su prioridad era hacer del territorio mexiquense el más seguro del país.
Con acciones concretas para el transporte como colocar cámaras en su interior para inhibir el delito; sin embargo, a tres años de su gobierno la promesa no ha sido cumplida, pues éstas, en la gran mayoría de los casos, solo sirven como testigo del crimen, un archivo de hechos delictivos que no tienen fin y es el pan de cada día de los mexiquenses.
En su tercer informe de labores, el mandatario estatal, presumió que en este 2020 se iniciaron 132 carpetas de investigación por el delito de feminicidio y se sentenciaron a 63 personas por este delito.
Pero…tan solo en las últimas semanas se ha reportado la desaparición de cuatro mujeres, de las cuales, una fue hallada sin vida, una joven de 19 años, originaria de Almoloya del Río, su cuerpo fue hallado a un costado del panteón de Santa Cruz Atizapán.
A la lastimosa lista hay que sumar los nombres de Karen, Claudia Patricia, y Ana Laura que hasta el momento no han sido localizadas.
¿Qué ha fallado en la estrategia? El estado de México ocupa uno de los primeros lugares en violencia de género y municipios como Ecatepec y Toluca, no son considerados seguros, según datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía.
A tres años de la promesa, ésta no se ha cumplido, aún falta tiempo… pero ¿Cuántos más deben morir para aceptar que la estrategia no ha sido la correcta?
